Procedente del inglés e incorporado recientemente al diccionario de la lengua castellana de la Academia Española, este término tiene dos significaciones: la atención preponderante al sexo en cualquier faceta de la vida y la tendencia a hacer distinciones entre los sexos para justificar el reconocimiento de diferentes derechos y diversas oportunidades ante la vida pública y privada.
En el fondo de esta actitud está la creencia en la superioridad de un sexo sobre el otro. Aunque en teoría esa superioridad pudiera ser de cualquiera de los dos, es generalmente el sexo femenino —el llamado “sexo débil”— el que sufre las consecuencias de la discriminación. El sexismo, por tanto, tiene generalmente la misma significación que <machismo.