Viene del francés logistique, que es un término militar que designa el arte de abastecer a las tropas en campaña. Comprende el conjunto de operaciones de suministro y apoyo a las unidades de combate —el transporte de personal militar y equipos, la alimentación y el alojamiento de las tropas, los cuidados sanitarios, las comunicaciones— necesarias para el éxito de las maniobras bélicas.
La logística es la parte del arte militar que atiende al movimiento y abastecimiento de las tropas. A su cargo está el aprovisionamiento, el cálculo de consumos, la dotación de elementos y el establecimiento de campamentos y acantonamientos sin trincheras. Para cumplir sus objetivos los contingentes logísticos tienen que afrontar los problemas del almacenamiento, formación de reservas estratégicas, transporte y distribución de municiones, víveres, medicamentos, ambulancias, equipajes, combustibles, insumos y todos los elementos materiales necesarios para la sustentación y operación de los efectivos movilizados. Estas tareas demandan personal altamente especializado, capaz de desplegar acciones planificadas, precisas, sincronizadas y previsibles que resultan indispensables para asegurar el éxito en el campo de batalla.
Por eso los estrategos militares siempre pusieron mucho énfasis en las operaciones logísticas y en la preparación del personal llamado a ejecutarlas, hasta el punto de que algunos de ellos llegaron a considerarlas como parte de la <estrategia o como la estrategia misma. Pero está claro que la logística y la estrategia no son la misma cosa y que el concepto de la segunda es mucho más amplio puesto que abarca la definición y alcance del conjunto de objetivos de largo plazo de los ejércitos.
Por extensión y analogía se llama logística, en la vida política, a las técnicas y procedimientos encaminados a atender organizada y sistemáticamente las necesidades de aprovisionamiento para la movilización y operación de campo de los partidos políticos durante los despliegues de masas, las campañas electorales, las operaciones de proselitismo o las movilizaciones de cualquier otro tipo.
En el ámbito de lo político la logística cumple funciones muy importantes de apoyo y abastecimiento a los agentes políticos en el cumplimiento de misiones especiales, de la organización y custodia de los procesos electorales y de otras operaciones partidistas.
El buen rendimiento de un partido depende, en gran medida, de la calidad de los servicios logísticos con que cuenta.