Es una palabra que viene de esnob y ésta del inglés snob. Significa la imitación de maneras, ideas o estilos de vida de aquellos a quienes se considera distinguidos. Afán de aparentar más de lo que se es y de ostentar más de lo que se tiene. Imitación de posturas políticas, elegancia afectada, asunción de actitudes artificiosas y falsas, admiración fingida y boba por todo lo que está de moda.
En "The Book of Snobs" (1848) —"El Libro de los Snobs—, escrito por el novelista inglés William Thackeray, se dice que “snob es el hombre o mujer que pretende constantemente ser algo mejor que lo que es, especialmente más rico y más a la moda”.
Esnobismo es, por tanto, la actitud de quienes, más por por petulancia que por candidez, aparentan sofisticación de costumbres o de conocimientos y simulan extasiarse en lo que no comprenden.
El esnobismo es una actitud de petulancia, que ofende. Y en esto se diferencia de la cursilería que es simplemente el mal gusto de personas que presumen de finas y elegantes sin serlo.
El origen de la palabra es muy curioso. En los antiguos tiempos de Roma, cuando se efectuaban los empadronamientos de los vecinos del municipio, se ponían al lado de los nombres los títulos de las personas nobles, pero en el caso de aquellas que no poseían títulos nobiliarios, se registraba la abreviatura s. nob., que significaba sine nobilitate (sin nobleza). Estos s. nob., como ocurre con frecuencia con los miembros de las capas medias, solían imitar a los aristócratas de su tiempo: trataban de parecerse a ellos y de reproducir sus costumbres, su lenguaje, sus gustos y sus estilos de vida. De allí se formó la expresión inglesa snob para señalar a los individuos que pretenden ser lo que no son y tener lo que no tienen.
En vista de que en nuestra lengua no hay una palabra equivalente, para llenar el vacío el diccionario castellano ha aceptado esnob.
En la vida social de los países estratificados es muy frecuente el esnobismo. Cuando una persona desea pertenecer a una clase que considera superior empieza por cultivar imitativamente las maneras y usos sociales de sus miembros. Hace todo lo posible por parecerse a ellos. En la vida política también. Se ve a menudo en los dirigentes políticos, no solamente su tendencia a trepar hacia las clases dominantes y a entrar en ellas de cualquier manera, sino además sus afanes de servil y fatua imitación de todo aquello que lleva la aureola de la moda o ha merecido la consagración de la <aristocracia de la sangre o del dinero.
Lo “snob” cambia en concordancia con las modas y las usanzas prevalecientes en cada tiempo y lugar, que dan “prestigio” a las personas. El esnobismo busca lo “in”, palabra inglesa que significa “estar dentro” de una moda, de una corriente tenida como elegante, de “una onda” juvenil o en concordancia con los nuevos tiempos.