Es un término económico con el que se designa la cantidad de dinero mantenida “en caja” por una empresa para pagar ciertas operaciones corrientes o hacer frente a gastos imprevistos. Es una forma de asegurar la >liquidez de un agente económico por precaución ante eventuales circunstancias emergentes. El encaje es, por consiguiente, la parte de sus activos que una empresa u otro agente económico mantiene en caja para una eventual utilización inmediata.
Los economistas suelen distinguir: encajes para transacciones o encajes de tesorería, que son los destinados a operaciones corrientes liquidables en dinero; encajes de precaución para hacer frente a riesgos, gastos imprevistos o pérdidas; y encajes de especulación, que sirven para maniobras de acaparamiento o de juego de precios.
Los encajes de precaución y de especulación constituyen, desde el punto de vista económico, un verdadero atesoramiento, puesto que su utilización efectiva es incierta y pueden devenir por tanto en una retención improductiva de dinero.
Todos estos encajes son de carácter voluntario y se diferencian de los encajes bancarios que son forzosos.