Esta expresión, que ha desaparecido junto con los regímenes marxistas, era usual en la vida política para designar al militante o simpatizante de un partido comunista que ocultaba su filiación política con propósitos de infiltración en otros partidos o en los organismos del Estado. Y era, con frecuencia, un <agente provocador.
El vocablo compuesto se forma con una palabra griega que significa “oculto” al igual que en criptografía, que es el arte de escribir con clave secreta, o en criptograma, que es un documento cifrado, o en criptoanálisis que denota la acción de descifrar criptogramas.